Es necesario tener documentos, objetos de valor y dinero a buen recaudo en nuestros hogares. En muchas ocasiones nos sentimos inseguros ante posibles ladrones y necesitamos poner nuestros bienes más preciados en un lugar seguro dentro de nuestro hogar. Las cajas fuertes son el lugar perfecto para poder asegurarnos que nuestros bienes están bien protegidos y que no les va a ocurrir nada. Siempre debes hablar primero con un cerrajero experto.
Esas cajas fuertes se venden en el mercado, pero en ocasiones pueden resultar bastante costosas. Por ello las puedes intentar fabricar tú mismo. Es cierto que son menos fiables que las compradas y más fáciles de abrir. Por ello en este post además de decirle cómo puede fabricar una caja fuerte casera os recomendaremos como disimular el lugar dónde la puede colocar, para asegurarse que no la van a encontrar de forma fácil.
Artículos relacionados:
- Abrir cerradura buzón sin llave
- Mantenimiento correcto de cerraduras
- Modelos de candados de seguridad
Hay muchos tipos de cajas fuertes caseras.
La primera que os vamos a presentar es una caja fuerte casera de combinación. Esta caja fuerte es muy segura, interesante y útil. Dispone de un dispositivo interior de cierre de seguridad que será muy difícil de abrir para aquellos que no posean la combinación adecuada.
Para proceder la fabricación de la misma hay que asignar el tamaño adecuado. Es recomendable hacerlas con las dimensiones que se utilizan en las cajas fuertes del mercado. Nuestro material utilizado va a ser la madera con 13mm de espesor. Necesitaremos para la fabricación de la misma cola blanca y clavos. La idea es que hagan una caja con la madera clavando los clavos y pegando con la madera, hay que colocarlo muy bien para que resulte muy complicado destruirla.
Es recomendable que el tope de retención de la puerta sea un trozo de la misma madera atornillado a 28 mm del borde anterior de un costado. El hecho de que esto sea así es impedir que la puerta entre demasiado en la caja y fuerce sus bisagras. La ranura practicada para el pestillo se hace a 13 mm del mismo borde, y tiene 57 mm de largo por 9 de ancho y 6 de profundidad (estas medidas son orientativas, pero muy recomendables). En el listón correspondiente al borde del cierre, se hace un rebajo de 51×9 mm, para que pase el pestillo. Y puedan colocar correctamente la cerradura. Es necesario que pueda moverse el pestillo de derecha a izquierda.
Lo más aconsejables es que se coloque un resorte de cerradura común, que se puede comprar en una ferretería o tienda de bricolaje. Se pone un sólido tornillo de cabeza redonda, qué pueda deslizarse sobre la parte inferior del resorte. Colocándolo con unos pocos tornillos. Si es satisfactorio, al hacer girar el eje de la lengüeta con los dedos el pestillo entrará y saldrá (es decir, abrirá y cerrará) sin inconvenientes esfuerzo. Si la acción fuera dura, se suavizan las piezas con papel de lija. Después de esto la puerta se articula a la caja con un par de bisagras de bronce de 38 milímetros. Si la puerta, dado a su tamaño la apertura se dificulta es conveniente cepillar el borde de cierre ligeramente y esto facilitará el movimiento.
Como se trata de una caja fuerte con un mecanismo de combinación, ese mecanismo es muy simple.
El mecanismo de combinación de la cerradura es muy simple. Debemos tener dos pares de discos, cortados previamente en secciones. Cuando los discos están en la posición indicada, los brazos de extensión del pestillo pueden moverse hacia atrás, pero en cualquier otra posición de los discos por lo que será imposible abrir la cerradura. Naturalmente, los discos se operan desde el frente de la puerta.
Las medidas exactas serían las siguientes:
Siendo :(l: largo; a: ancho; e; espesor)
– Costados, 2; 1. 305 mm a. 178 mm, e. 13 mm
– Parte superior e inferior, 2; 1. 228 mm, a. 178 mm, e. 13 mm
– Parte posterior y puerta, 2; 1. 279 mm, a. 228 mm, e. 13 mm
– Parte posterior y puerta, 2; 1. 279 mm, a. 228 mm, e. 13 mm
– Cubierta interior de la puerta, 1; 1. 279 mm, a. 228 mm, e. 3 mm
– Accesorios: Madera terciada de 9 mm para el pestillo, el estante y la manija: 305 x 305 mm
– Madera terciada de 3 mm, para los discos: 101 x 203 mm
– Dos secciones de varilla de 25 mm y de 9 mm (unos 15 cm. de c/una).
– Varilla de sección cuadrada de 13 mm de lado, 2 pedazos de 609 mm
Exactamente en el centro de la varilla se hace un orificio de 9 mm, que la atraviesa de parte a parte; se toman ahora los otros dos discos C, se cortan dos pedacitos de varilla de 9 mm de diámetro y de 22 mm de largo, y se encola uno sobre cada disco. Se ponen las varillas en los agujeros de los discos ya puestos en posición y en sus partes proyectantes los discos C4, de madera terciada, de 32 mm de diámetro. Ambos pares de discos C, sobre el lado interior de la puerta.
En los discos exteriores se coloca papel blanco encima y se dibuja sobre ellos doce letras en orden alfabético y disponiéndolas de manera que las letras elegidas para abrir la caja queden en línea con las flechas cuando los discos interiores estén en la correcta posición que permite abrir la caja de seguridad. Luego se pone una manija torneada sobre el eje de la lengüeta, para poder abrir la puerta.
Puedes terminar tu caja fuerte pintándola o echándola una capa de barniz. Y para finalizar lo más adecuado es que guardes tu caja en un lugar que disimule. Como detrás de un cuadro, en el interior de un armario de forma disimulada. Aunque la mejor opción es esconderla en un falso techo o suelo. Recuerda que somos expertos en reparación y apertura de cajas fuertes.